Y un trapito pa quitar la montaña de polvo que hay aquí, lalalala...
Bueno, bueno, esto mío no tiene perdón de Dios (o de Mahoma o de Buda o de cual sea vuestra divinidad). Hace mogollón mogollón que tengo esto abandonadísimo. ¡No puede ser! Así que os hago un breve radiopatio exprés. Mi vida ha cambiado bastante: nuevo curro, nuevo hogar, nuevas experiencias... (eso sí, todo temporal temporal) y por todo ello (y por money money) estoy sin internet. Además como trabajo más que los relojes, pues el poco tiempo que me queda no lo destino a los ordenadores, que los tengo aburridos ya. Ahora, como parece que el trabajo disminuye, me he puesto las pantunflas, el delantal y los guantes, y he decidido poner un poco de orden a este mi rinconcito.
Prometo ir entrando más a menudo. Aunque también reconozco que me resulta mucho más fácil escribir en momentos de bajón, que no es el caso ahora.